Lo unico que agregaria a la critica de Primer Plano, con la que coincido casi en su
totalidad, es el caracter "sorpresa y media" del final. Nunca imagine algo tan
patetico despues de ese excelente comienzo. Desde que el gerente de la cadena de
television "reta" a la señora de la entrada porque cómo habia hecho esperar a
una chica que queria verlo el dia entero parada en la puerta de entrada, hasta el final al
que solo le falta que aparezcan los Prepu para decir: mision cumplida. Ni siquiera hace un
final feliz en el que el Estado se hace cargo de las necesidades que sufre la escuela, que
por lo menos si hay final feliz que realmente lo sea. Sino que son donaciones de una
cadena de televisión. Reitero: patético.
Julián Weich (Buenos Aires, Argentina. Edad: 25)
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